El cardenal Baltazar Enrique Porras Cardozo anunció el pasado 14 de mayo de 2022, que antes del fin de año, darán a conocer nuevas Causas de Beatificación y Canonización de venezolanos, cuyas vidas fueron testimonio fiel de Jesucristo.
Caracas, 19 de mayo de 2022
Una de las causas emprendidas es
la del cardenal José Alí
Lebrún Moratinos. De él se dice que fue hombre santo por ser de vida ejemplar. Su historia es reciente y la iglesia lo llama "Pastor Bueno".
Se trata del Segundo Cardenal de Venezuela y XIII arzobispo de Caracas, que Porras Cardozo presentó ante Prefectura para la Causa de los Santos el 3 de marzo de 2021, entregando la petición “Nulla Osta”.
Tras su aprobación, el Cardenal Lebrún es ahora considerado Siervo de Dios y comienza el proceso que lo llevaría a la condición de Venerable, es decir al reconocimiento de que llevó una vida de acuerdo con el Evangelio y el Papa declare sus “virtudes heroicas”.
Luego vendrá la condición de Beato y posteriormente la de Santo, cada etapa con sus propias exigencias.
Al ser considerado Siervo de Dios, se comenzó a conocer la oración -"aprobada por el Cardenal Porras"- para orar por su pronta beatificación, según confirmó el padre Francisco Morales, vice postulador de la Causa.
Los devotos pueden acudir a él de manera privada en solicitud de favores o pedir por su beatificación. En ese sentido, cualquier información debe ser enviada al correo: causacardenallebrun@gmail.com, dice la estampita.
Sobre este importante hombre de la iglesia venezolana, se repone trabajo publicado en Aleteia.
Ramón Antonio Pérez | Mar 21, 2019
Su bonhomía, lo hizo constructor de la paz, del entendimiento, de la bondad que le brotaba a borbotones por todos los poros, destacó en su mensaje.
Jugaba a ser sacerdote
José Alí fue un niño bondadoso. Siempre manifestó su vocación para seguir a Dios y convertirse en sacerdote, y jugaba con la idea de celebrar una misa, confesó la señora Nelly a Aleteia, luego de culminada la celebración religiosa en el Día de San José.
Era un hombre tranquilo y no confrontaba con nadie. Fue muy familiar con su gente y con el prójimo que lo buscaba para pedirle algún consejo, indicaba.
De no ser sacerdote, a José Alí le hubiese gustado ser marinero o periodista; sin embargo, a pesar de que no fue periodista, en su labor pastoral siempre estuvo vinculado con los medios de comunicación social y eso lo complacía enormemente.
Cuando hacía visitas pastorales prefería comer con la gente sencilla, y no le gustaba acudir a los grandes banquetes que lo invitaba la alta sociedad de entonces, dijo.
Cardenal Porras: “José Alí no buscaba los honores”
La mejor herencia que nos dejó el Cardenal Lebrún fue su testimonio de vida.
Los signos de los tiempos y los de Dios se unieron para dotarlo de las virtudes que más tarde desparramó con generosidad y sencillez, expresó en la catedral caraqueña.
Tengo la satisfacción y el honor de haberlo tenido como mi maestro y mi amigo en los años en que él me confió ser rector del Seminario San José de El Hatillo, y haber recibido de sus manos la ordenación episcopal.
Desprendido de todo lo que tenía, lo compartía con gusto y sin que nadie lo notara. Para él la unidad y la concordia estaban por encima de cualquier otro postulado. Sabía perdonar con largueza, consolaba al afligido y tendía la mano al que erraba. Su humildad le brotaba con tal naturalidad que parecía imperceptible.
Intercede por Venezuela
La justicia y la verdad, la transparencia y la honestidad fueron virtudes que practicó en forma heroica, y ser en estos momentos hoja de ruta para comportarnos como verdaderos hijos de la fe que heredamos de nuestros mayores.
Es hora de orar por él, de pedirle que interceda por nosotros y por esta Venezuela a la que tanto amó y sirvió.
0 Comentarios
Comentarios de Nuestros Visitantes
Agradecemos sus comentarios, siempre en favor de nuestra Fe Cristiana Católica y de manera positiva. Si considera válido su comentario para ser publicado, se agradece no usar una cuenta anónima o desconocida.