Panaquire vivió
intensamente la ordenación de Carlos José Salazar Pacheco, un joven misionero, vecino
de esta comunidad
Ramón Antonio
Pérez / @GuardianCatolic
Panaquire,
25 de julio de 2015.- “No somos nosotros los que hemos escogido al
Señor; ni la vocación es ante todo una elección nuestra como si se tratara de
una carrera profesional. No. Ella es siempre, y en primer término una llamada
de lo alto”.
Fueron
expresiones de Monseñor Gustavo García Naranjo, este 24 de julio, durante la
ordenación sacerdotal de Carlos José Salazar Pacheco (Misionero de la
Consolata), en el auditorio de la U.E. “José Nicomedes Marrero”, en Panaquire,
estado Miranda.
El
Obispo de la Diócesis de Guarenas estuvo acompañado del padre Stefano
Camerlengo, superior general del Instituto Misioneros de la Consolata; y el
superior de la delegación de Venezuela, padre Peter Makau, entre otros religiosos
e integrantes del clero diocesano.
“El designio amoroso de Dios sobre cada uno
de sus hijos; designio que proviene desde antes de todos los siglos, es decir,
Carlos José, Dios te eligió desde hace mucho tiempo”, agregó durante la
homilía.
Las responsabilidades del nuevo
sacerdote
“Ten,
pues en cuenta, querido Carlos José, que es el Señor quien te ha llamado desde
toda la eternidad, y es Él quien te ha consagrado, te ha tomado aparte para que
seas su propiedad. Por la imposición de las manos y la oración
consecratoria, tu vida de ahora en adelante quedará configurada con Cristo
sacerdote”, indicó el Obispo.
Más
adelante recordó las responsabilidades que Carlos José tendrá como sacerdote.
“Por
la consagración quedarás sellado con una nueva identidad como sacerdote
misionero del Señor; actuarás en nombre de Cristo; serás administrador de sus
sacramentos para bien del pueblo de Dios; presidirás en servicio eucarístico en
la Iglesia y deberás ofrecerte a ti mismo, juntamente con el Señor en el Altar
para ser con él victima viva para alabanza de su gloria y salvación de los
hombres”, expresó.
Mientras
predicaba el Obispo de Guarenas, Carlos José Salazar, su madre María Vela y
muchos feligreses, reventaban en sollozos como signo de que las palabras del
pastor llegaban a lo más profundo de cada uno.
“Valeria, tu abuela materna, te
enseñó a rezar tus primeras oraciones con sencillez. Con su gran amor, ella
hizo todo lo posible por lo que ahora vas a ser: un sacerdote”, dijo Monseñor
García Naranjo.
No te canses de ser misericordioso
Habló
de la obediencia a sus superiores ya que con esa actitud “seguirás la obra
santificadores de Jesucristo”, dijo el Obispo. “Cuando celebres la misa,
reconoce por tanto lo que haces, no lo hagas de prisa, imita lo que celebras
porque no es un rito artificial”.
Igualmente le dijo que “con el bautizo
agregarás nuevos fieles al pueblo de Dios; vas a bautizar muchos niños. No rechaces
nunca el bautismo a quien te lo pide”.
Respecto
al sacramento de la Penitencia, expuso: “perdonarás muchos pecados en nombre de
Cristo y de la Iglesia. Y yo, en nombre de Jesucristo El Señor, y de su esposa
la Santa Iglesia, te pido Carlos, que no te canses de ser misionero. Que no te
canses de ser misericordioso (…) de ser otro Cristo en esta tierra. En el
confesionario tú estás para perdonar, no para condenar".
Imita al Padre: nunca Él se cansa
de perdonarnos a nosotros a pesar de lo malo que muchas veces nos portamos”,
recomendó el pastor.
Una fiesta ardiente y del tambor
La
procesión ceremonial partió a las 10 de la mañana desde el templo parroquial de
“Nuestra Señora de la Candelaria”. La diminuta imagen de la patrona iba al frente de la caminata adornada con flores
del lugar, entre alegres cantos de una feligresía que desde esta fecha puede
decir que cuenta con un sacerdote surgido de entre sus vecinos.
Durante
el acto de revestimiento de Carlos José, sus padres y Stefano se compartieron
la tarea. Pero al expresar sus palabras, el nuevo sacerdote apenas tuvo tiempo
para agradecer a quienes han hecho posible que su vocación haya llegado a feliz
término. La emoción nuevamente le hizo quebrar la voz.
El padre Peter dio a conocer que el joven
religioso retornará a Elche, España, para seguir con este compromiso de entrega Dios a quien en
esta fecha se ha consagrado definitivamente.
Finalmente,
es de destacar que un ensamble de músicos de Panaquire, Tapipa y El Clavo, acompañó
con sus alegres ritmos durante la eucaristía, así como la participación de
jóvenes parroquianos que hicieron presentaciones culturales en torno a los
valores. Al finalizar la eucaristía, se compartió la comida y los músicos continuaron
deleitando la gran fiesta de esta comunidad mirandina.
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