Solemnidad de Nuestra Señora de Coromoto, Patrona de Venezuela

  
La aparición de la Virgen de Coromoto es de las pocas reconocidas por la Iglesia Universal. El 8 de septiembre de 1652 habló con el cacique de los indios Cospes en Venezuela, invitándole a que “saliera a donde estaban los blancos para recibir el agua sobre la cabeza y así poder ir al cielo”

Pedro Reinaldo Bravo
Caracas, 7 de septiembre de 2021

El 11 de septiembre es la solemnidad litúrgica de Nuestra Señora de Coromoto, Patrona de Venezuela. Es motivo de júbilo porque recordamos y damos gracias a Dios debido a que Venezuela tuvo el privilegio de la visita de la Santísima Virgen María en los tiempos de evangelización en América, convirtiéndose en misionera del Evangelio de su Hijo Jesucristo para darnos un mensaje de fe y salvación.

De las diversas advocaciones marianas que veneramos y festejamos en los diferentes lugares de Venezuela, la advocación de Nuestra Señora de Coromoto es de gran importancia. Constituye una auténtica aparición mariana que representa la segunda en América después de México en el año 1531 al indígena San Juan Diego en su advocación de Guadalupe.

Pero ¿qué es una aparición mariana?

El término de aparición significa que la Santísima Virgen se hace visible corpóreamente a los sentidos humanos (se puede ver, escuchar y hablar) para transmitirnos un mensaje de fe y de esperanza. 

Por tal motivo, Venezuela es nación privilegiada por la aparición de la Madre de Dios conjuntamente con México en la advocación de Guadalupe en el año 1531; Francia en el año 1830 en la advocación de la Medalla Milagrosa; nuevamente en Francia en la advocación de La Salette en 1846; Lourdes también en Francia en el año 1858; y Fátima, Portugal en el año 1917.

Vayan a recibir el agua sobre su cabeza

La aparición de la Santísima Virgen en Venezuela sucedió por lo menos en dos ocasiones en Guanare, estado Portuguesa. De la primera no se sabe la fecha exacta, pero se estima que pudo ser a mitad del año 1651 o principios de 1652 al cacique Coromoto y a su mujer.

Sucedió en una quebrada en el momento cuando ellos se dirigían a una parte de la montaña en donde tenían una tierra de labranza. La Virgen le habla al Cacique en su idioma indígena. Con mirada y voz tierna le dice que vayan al lugar donde viven los blancos para recibir el agua sobre la cabeza y así poder ir al cielo, expresando de esta forma que recibiera tanto él como su tribu el Bautismo.

Un hacendado de aquella región llamado Juan Sánchez, español y buen cristiano, pasaba cierto día por esos lugares rumbo a El Tocuyo, población actual del estado Lara. En el camino le sale a su encuentro el Cacique y le cuenta lo sucedido. Sorprendido por el relato le dice que debido a su viaje estará de regreso la semana siguiente. Los invita a estar preparados para irse con él.

A los ochos días el Cacique y su tribu se fueron con Juan Sánchez y al llegar a unos parajes conocidos como Tucupido, se establecieron en una explanada y le dieron el nombre de Coromoto. En ese lugar recibieron las tierras para las labores y asistían a las enseñanzas de la doctrina cristiana que les impartía el mismo Juan Sánchez. Los indígenas empezaron a recibir las aguas bautismales.

El cacique al principio estaba feliz con su nueva vida, pero después se fue decepcionando debido que añoraba su libertad, su selva y montaña y se fue apartando de las enseñanzas de la fe cristiana y por ende de recibir el Bautismo. El sábado 8 de septiembre de 1652, día que la Iglesia celebra la natividad de la Madre de Dios, el Cacique decide volver a su choza en las montañas después de rechazar una invitación de Juan Sánchez de participar en un acto en honor la Reina del cielo.

En la noche de ese día 8 de septiembre de 1652, la Santísima Virgen se aparece nuevamente y con gran resplandor al cacique Coromoto en su choza e iluminando todo el bohío. Con el Cacique se encontraba en ese momento su mujer, su cuñada Isabel y un hijo de ésta última de unos 12 años (hasta los momentos es la única aparición en el mundo en que la Madre de Dios se aparece a una familia). 

El indio al verla le reclama por su nueva vida, su mujer lo reprende y defiende a la Bella Señora como ellos la llamaban. El indígena busca un arco para dispararle, pero la Madre de Dios entra serena a la choza, acercándose al Cacique. Él al verla con tanta majestad y bondad desiste de su intención, pero se dispone agarrarla y echarla fuera. En ese instante la Madre del Redentor desaparece y deja en las manos del indígena la sagrada reliquia.

El domingo 9 de septiembre de 1652, el cacique se dispone huir con otros indígenas hacia los montes y una culebra venenosa lo muerde. A gritos pide el Bautismo. Por providencia divina, un moreno criollo de la ciudad de Barinas y fervoroso cristiano quien pasaba por ese lugar lo bautizó. El Cacique antes de expirar recomienda a los indios que estén cerca de los blancos y muere en paz y en gracia de Dios.

El Santuario dedicado a la Virgen de Coromoto

El Episcopado venezolano proclamó a Nuestra Señora de Coromoto Patrona de Venezuela el 1 de mayo de 1942, y el Papa Pío XII confirmó la decisión de los obispos declarándola “Celeste y Principal Patrona de Venezuela” el 7 de octubre de 1944.

En mayo de 1949 el mismo Papa Pío XII decretó la coronación canónica a la sagrada reliquia efectuándose la solemne ceremonia litúrgica el 11 de septiembre de 1952 en Guanare por el Cardenal Manuel Arteaga y Betancourt, Arzobispo de La Habana, Cuba y delegado papal. El 27 de enero 1985 el Papa San Juan Pablo II coronó una imagen de la Santísima Virgen de Coromoto en la solemne Eucaristía que presidió en Montalbán, Caracas en su primera visita a Venezuela.

Actualmente la Reliquia se venera en el Santuario Nacional de Guanare, construido en el mismo sitio de esta segunda aparición. Fue consagrado el 7 de enero de 1996 e inaugurado y bendecido por San Juan Pablo II, el 10 de febrero de 1996 en su segunda visita a Venezuela. En el año 2006 es elevada a Basílica Menor por el Papa Benedicto XVI. Esta imagen que se venera en Guanare tenía en su peana la sagrada reliquia que dejó la Madre de Dios al cacique Coromoto para la veneración de los fieles, y tiene el privilegio de ser coronada por el mismo Santo Padre.

La Reliquia que quedó en manos del indígena

La reliquia que dejó la Madre de Dios en las manos del cacique el 8 de septiembre de 1652, es una diminuta imagen en forma ovalada que mide 2,5 cm de alto por 2 cm de ancho que representa a la Santísima Virgen con el Niño Jesús en su regazo. Constituye un regalo celestial para recordarnos que la Madre del Redentor es nuestra madre espiritual; que está cerca de nosotros y nos guía hacia su Hijo Jesucristo. 

Dicha reliquia estuvo deteriorada por diferentes motivos por muchos años hasta que en el año 2009 se tuvo la grata noticia que fue restaurada con éxito por un equipo de expertos donde se puede ver actualmente su imagen con claridad y donde hallaron varios descubrimientos para mayor gloria de Dios y el bien espiritual de cada uno de nosotros.

Por tales motivos el 11 de septiembre es día de mucha importancia para Venezuela porque es la festividad litúrgica de nuestra Madre de Coromoto y fecha de su coronación canónica. En todo el país se deben celebrar con mucha solemnidad a la Patrona Nacional porque nuestra nación tuvo el privilegio de su aparición y eso no debe pasar desapercibido sino más bien darle la relevancia que se merece. 

Además, es un día para recordar y poner en práctica su mensaje: vivir nuestro Bautismo, el salir al encuentro con el hermano especialmente con los pobres, enfermos y necesitados. También la importancia que tiene la familia como iglesia doméstica y escuela de valores.

ORACIÓN. - Que María de Coromoto bendiga y proteja a Venezuela tierra de gracia y nación consagrada al Santísimo Sacramento, renovando la fe en cada uno de nosotros y en el mundo entero para que prevalezca la paz, la justicia y los valores cristianos.



Publicar un comentario

1 Comentarios

  1. Virgen Santisima hoy muchos venezolanos nos Consagramos a ti y oramos por nuestra Patria y por el mundo lo hacemos con la confianza de que Tu estas intercediendo por nuestra Patria. Bendita seas Madre.

    ResponderEliminar

Comentarios de Nuestros Visitantes

Agradecemos sus comentarios, siempre en favor de nuestra Fe Cristiana Católica y de manera positiva. Si considera válido su comentario para ser publicado, se agradece no usar una cuenta anónima o desconocida.