Diócesis de Trujillo festejó con mucha devoción al Niño Jesús de Escuque

Fue el segundo año consecutivo en que esta fiesta se celebra con medidas de bioseguridad por la pandemia. Pese a ello, los devotos participaron en la fiesta del Niño Jesús de Escuque con gran devoción y entusiasmo

Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
Con NdP Vicaría diocesana para las comunicaciones
Escuque, 17 de enero de 2022

“Hoy es un día muy importante para Trujillo porque es la fiesta del Niño Jesús de Escuque. Nuestras miradas se vuelven a este histórico lugar, como cada 14 de enero, para contemplar el Dulce Nombre de Jesús, celebrar con alegría su fiesta litúrgica y al mismo tiempo escuchar la enseñanza de la Palabra de Dios que nos invita a la meditación en el amor de Dios y a la acción en el amor a los hermanos”.

Fueron las palabras que el presbítero Rubén Gregorio Delgado Carmona, dirigió a la numerosa concurrencia el viernes 14 de enero, en el majestuoso templo de Escuque, dice una nota de prensa enviada desde la Diócesis de Trujillo. El vicario general de la diócesis exaltó el significado de la celebración que congrega cada año a miles de devotos.

Tomar conciencia de la comunión y hermandad

Inspirándose en las lecturas bíblicas de la Santa Misa, Delgado Carmona hizo un llamado a pedir el don del Espíritu Santo para que la admiración y la contemplación del misterio del Dulce Nombre, también vayan acompañadas de una fe viva y activa, especialmente en esta diócesis de Trujillo. 

“Uno de los llamados más urgentes en este tiempo de crisis es el tomar conciencia de que somos cristianos no solo individualmente sino en la comunión con los hermanos”, dijo el sacerdote.

Así mismo invitó a reconocer la apremiante convocatoria que nos hace el Señor para que seamos una Iglesia en salida, como dice el Papa Francisco. 

Es decir, una iglesia que camina en comunión y fraternidad, para ser testigo auténtico del amor en una realidad compleja, desde la experiencia de sinodalidad que en resumidas cuentas es caminar juntos, desde la particularidad de cada persona, cada vocación y cada carisma.

“Acompañaron al padre Rubén Delgado en la solemne concelebración eucarística que se inició a las once de la mañana, el párroco presbítero Miguel Ángel Monsalve y una nutrida representación de sacerdotes”, dice la nota recibida por El Guardián Católico. 

Estuvieron presentes los grupos de apostolado, devotos provenientes de diversos lugares, religiosas, seminaristas y representantes de las autoridades municipales y regionales.

El templo parroquial estaba soberbiamente adornado y la preciosa imagen del patrono en su lugar central presidiendo y luciendo coloridos arreglos florales; destacaba la belleza del lugar la reciente pintura interior y exterior que trabajó el párroco con la feligreses, devotos y ayudas de particulares. 

“En los alrededores del recinto religioso se colocaron puntos de observación de salud y primeros auxilios mientras las calles circundantes se cerraron para permitir solo el paso peatonal”, agrega la nota.

El padre Rubén Delgado expresó la salutación y las oraciones del obispo diocesano monseñor José Trinidad Fernández Angulo a la feligresía y a los devotos del Niño. Indicó que esta semana, después de cumplir con sus obligaciones en la Conferencia Episcopal Venezolana, monseñor Fernández se integrará a sus tareas pastorales en nuestra diócesis. 

También compartió su experiencia personal de que allí en Escuque hace un año, cuando durante la misa patronal, prestó juramento para asumir como administrador diocesano mientras designaban al nuevo Obispo de Trujillo.

Sin procesión, pero con veneración

Las fiestas del Niño Jesús se llevaron a cabo con toda solemnidad pues, además de la esplendorosa “bajada” del niño desde su trono y el recorrido en caravana por las calles del pueblo, hubo la novena de misas y celebraciones muy concurridas y con la presencia de sacerdotes. Para este día central, viernes 14 de enero, se programó la celebración eucarística en varios horarios para facilitar la participación de la numerosa feligresía.

Este año, como el pasado, no se realizó la tradicional y concurrida procesión por razones pastorales ante la situación de la pandemia del COVID 19. Las autoridades eclesiásticas, en la voz del padre Rubén Delgado, explicaron que ese ha sido el proceder de los obispos a nivel nacional con las grandes concentraciones de fieles que se realizan en la calle como, por ejemplo, la Divina Pastora en Barquisimeto.

No obstante, los devotos pudieron venerar a su querido Niño Jesús. La preciosa imagen fue expuesta para que en una ordenada fila los feligreses pasaran frente a ella a rendir sus tributos y oraciones. Además, se organizó el recorrido por las calles de Escuque en una bonita carroza adornada para la ocasión.

El entusiasta párroco agradeció el trabajo del equipo que participó en la preparación, organización y relación de las solemnes fiestas religiosas así mismo a las particulares y a los feligreses que aportaron para los trabajos de pintura de templo parroquial y a la Alcaldía el municipio por el apoyo en algunas áreas de la infraestructura.