La Patrona del Zulia bajó de su camarín el 30 de
octubre, para encontrar al pueblo de Dios reunido. "Poco a poco la iremos
viendo, hasta tener nuestra mirada fija en su rostro amoroso y en el del
virtuoso San José”, expresó el arzobispo de Maracaibo
Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
Con nota de @CEVmedios
Caracas, 1
de noviembre de 2021
El 30 de octubre de 2021, en horas de la tarde, se
llevó a cabo la Bajada de la imagen de Nuestra Señora de Chiquinquirá, con la
que iniciaron las festividades en honor a la patrona del estado Zulia. Monseñor
José Luis Azuaje, Arzobispo de Maracaibo, presidió la Santa Misa, celebrada en
la plazoleta de la Basílica.
Este año la celebración está dedicada a las familias. Por
eso, “La Chinita”, como es conocida Nuestra
Señora de la Chiquinquirá, estuvo acompañada por la imagen de San José,
padre putativo de Jesús a quien la Santa Sede declaró 2021 como su año jubilar.
Durante su homilía, Monseñor Azuaje hizo referencia a la Sagrada Familia de Nazareth e invitó a permitir “que Jesús vuelva a nuestra casa”, así como volvió junto a sus padres en aquél pasaje bíblico en el que María y José en su búsqueda, lo hallan en el templo, dice la nota que la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) publicó en su portal.
“En esta celebración la Virgen y San José también nos buscan”, expresó el arzobispo de Maracaibo y presidente de la CEV.
Ellos buscan al pueblo de Dios en medio de una pandemia que ha generado sufrimiento a las familias e instituciones, que ha limitado el nosotros comunitario de pueblo y de familia, y lo encuentran en esta plazoleta, al frente del santuario de la casa de la Virgen donde nuestro pueblo viene a venerarla, dijo.
Afirmó que la familia “es considerada uno de los espacios virtuosos de la sociedad, donde se aprende a valorar la vida propia y la de los otros.
En vista de ello, invitó a “fortalecer los valores necesarios
para el desarrollo de la sociedad”, destacando cuatro de ellos, y
presentándolos como verbos que motivan a la acción: honrar, respetar, obedecer y cuidar.
“Este itinerario no es fácil, el mundo de los valores
no es sencillo”, indicó José Luis Azuaje Ayala. Recomendó “revestirse de
entrañas de misericordia, de bondad, humildad, mansedumbre, paciencia (…) Hay
mucho sufrimiento en la sociedad, pero de nuestra libertad y actitudes depende
un vuelco total”.
De acuerdo con la información brindada por la CEV, con
la Bajada de la Virgen de Chiquinquirá, inició el recorrido por la ciudad en el
“María móvil”, como alternativa a la peregrinación que no se realizará debido a
la pandemia por Covid-19.
Se conoció que, en esta oportunidad, el manto de La Chinita está inspirado en las almas de quienes fallecieron a causa de dicha enfermedad, y las huellas de quienes sobrevivieron a ella.
Representan además, “un signo de que María Santísima acompaña a todos sus hijos en medio de los momentos de angustia y dificultad”, concluye la nota de la Conferencia Episcopal.
El mensaje de monseñor José Luis Azuaje
Ayala se pude descargar visitando el portal de la CEV en el siguiente enlace: HOMILIA-BAJADA-DE-LA-VIRGEN-30-10-2021
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