Ramón Antonio Pérez
Guatire 29
de junio de 2011.- Monseñor Gustavo
García Naranjo presidió por primera vez desde que dirige la Diócesis de
Guarenas, la eucaristía en la Iglesia Santa Cruz de Pacarigua, de esta ciudad, con
motivo de la Fiesta de San Pedro y San Pablo, con un mensaje centrado en la paz
y armonía que generó entusiasmo entre los feligreses y devotos de la zona…
Esta vez, a pesar de que en Guatire, estuvieron
presentes en la misa el Gobernador de Miranda Henrique Capriles Radonski y el
Alcalde de Zamora Oswaldo Sifontes, la fiesta se desarrolló en un clima festivo
y completa armonía, quizás en atención al llamado hecho por el Obispo de
Guarenas y en respeto a los acuerdos de tolerancia concertados previamente
entre los parranderos de San Pedro.
El Obispo de Guarenas estuvo acompañado por el párroco
de Santa Cruz de Pacairigua, Padre Carlos Frías; Padre Ramón Márquez; Diácono
Permanente Felix Colmenares y demás acólitos. Durante el evento se presentó el
cantante Adrián Guacarán quien durante el momento de la Comunión interpretó El
Peregrino.
¡Viva San
Pedro!
El Obispo realizó una entusiasta homilía motivando a
la cordialidad y la paz entre los devotos del Santo, quienes con sonoros
aplausos, confirmaban las palabras del Prelado de la zona. Ello facilitó que
esta fiesta se realizara sin los enfrentamientos de años anteriores, cuando
simpatizantes del chavismo y de la oposición, incluso, propiciaron la
suspensión de actos religiosos, resaltando la importancia cultural de la
Parranda de San Pedro en la zona de Guarenas – Guatire.
“Esta Villa Heroica se viste de folclor para celebrar el
favor concedido por San Pedro a María Ignacia, una mujer esclava y creyente de esta
zona, cuya fe ha facilitado que se celebre cada años esta parranda”, dijo
Monseñor García Naranjo. También habló de la importancia de San Pedro como
primer Papa de la Iglesia Católica. “Esa Iglesia que empieza con San Pedro, y
que está con nosotros para animar y acompañar la gente”.
Asimismo el Obispo defendió la razón espiritual de
Jesucristo. “El Señor no es revolucionario de condición política como algunos
pretenden reducirlo, sino que es el Hijo de Dios, el Mesías que fue enviado en
medio de los hombres para revelarles a éstos al propio Dios, y darles la
salvación”.
La Iglesia en cuanto es una comunidad terrenal de los creyentes
y expresión de la manifestación de Jesucristo fue, de igual manera, defendida
por Monseñor Gustavo García Naranjo. “La Iglesia es obra de Jesucristo… y nadie
puede impunemente ofenderla, porque al ser obra de Jesucristo es también la
Obra de Dios”, expresó, arrancando un prolongado aplauso a quienes años
anteriores se habían enfrentado.
Reconoció que en Guatire la devoción de esta fiesta
motiva la paz y el reencuentro entre los guatireños. Pero el Obispo tampoco olvidó
el grave problema que se vive en la zona con la situación de la cárcel de El
Rodeo y pidió “a las autoridades competentes la pronta solución de esta
situación y que se respeten los derechos de los presos, según lo estipulado en
la constitución nacional”.
Capriles: “nuestras
diferencias son muy pequeñas”
El Gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski,
asistió a la misa ofrecida en honor a San Pedro en la iglesia de Santa Cruz de
Pacairigua, y una vez culminada la homilía los parranderos entonaron sus voces dando
inicio así a las fiestas del Santo.
Capriles Radonski destacó que la Parranda de San Pedro
es patrimonio del estado, no solamente para Guarenas y Guatire, sino que es de
todos los mirandinos. “Nos tenemos que sentir orgullosos de todas las fiestas
culturales religiosas que convocan a nuestro pueblo. Orgullosos estamos los
mirandinos de nuestras festividades y
nuestro valor cultural, que nos unen como un solo pueblo, un solo pueblo un
solo estado, con un solo objetivo que es progresar”.
Refirió que en todas las zonas del estado a lo largo
del año, siempre hay alguna tradición que convoca al pueblo, no hay un solo
patrono, ni una sola fecha que celebrar. “Eso es lo más importante poner el
acento en todo lo que coincidimos. Nuestras diferencias son muy pequeñas. La
política se ha tratado de meter en todo para generar discrepancias entre
nosotros”, expresó.
Alcalde
Sifontes: “San Pedro no morirá”
Por su parte, el alcalde Oswaldo Sifontes se mostró
muy contento con la fiesta y compartió con sus pobladores. Al ser consultado
por los periodistas expresó que el “pueblo de Guatire ha acudido de manera
multitudinaria, a disfrutar de estas fiestas. Acá disfrutamos de un importante
ciclo de celebraciones que comenzó con la exposición de fotografías, pinturas
alusivas a la tradición, y con muchas otras actividades que todos han podido
disfrutar en grande”.
De igual manera expresó con entusiasmo que “la
tradición del San Pedro no morirá, sino que por el contrario, seguirá
afianzándose en el pueblo de Guatire, en aquellos que nacen en Guatire, que vienen
a vivir a Guatire", indicó.
El Nuncio en
Guarenas
Simultáneamente, en la Catedral Nuestra Señora de
Copacabana de Guarenas, la misa fue oficiada por el Nuncio Apostólico de Su
Santidad en Venezuela, Monseñor Pietro Parolín. En sus oraciones, además de
bendecir a los devotos, envió un mensaje a las familias: “estas tradiciones
están arraigadas en la fe y es bueno que se conserven y se trasmitan a las
nuevas generaciones para que a través de estos actos se reafirme nuestra fe
católica, recordemos que Pedro y Pablo
son los pilares donde Jesús quiso edificar la iglesia, de donde todos somos
parte, debemos llevar la fe a todas las actividades que realizamos en nuestra
vida”.
En Guarenas estuvieron presentes miembros de la
Asociación Civil Antonio Núñez Parranda de San Pedro de Guarenas y San Pedro
Regresa a sus Raíces, entre otras, además de las parranditas de los colegios
Sequín Vera, Simón Rodríguez, Alberto Lovera y Régulo Rico.
La Fiesta de
San Pedro
También participan niños vestidos con un traje rojo y
amarillo, que se conocen como "tucusitos". El personaje más llamativo
es un hombre vestido de mujer que carga una muñeca de trapo, que encarna a la
esclava “María Ignacia” y la muñeca a su hija “Rosa Ignacia”. Todos llevan la
cara pintada de negro con betún o lo que ellos llaman “negro humo"” y
llevan cotizas en sus pies. Con el ritmo de cuatro y maracas, los parranderos cargan
en forma danzante a San Pedro, primero para entra a la misa y luego de ésta
para recorrer las calles de ambas ciudades.
Esta tradición cultural – religiosa, tuvo sus inicios
durante la época de la Colonia, en el Cantón de Guarenas dónde esclavos y
esclavas agradecían con bailes y cantos, las cosechas obtenidas en la Hacienda
“San Pedro”. La historia también hace mención a uno de los milagros más famosos
concedidos por San Pedro, la sanación de la hija de María Ignacia, negra
esclava que pidió por la salud de su pequeña a cambio de cantar y bailar como
pago de promesa cada año.
En Guatire al finalizar la misa, cada una de las
Parrandas de San Pedro se fueron presentando ante el Obispo de Guarenas enarbolando
estrofas por parte del líder de la agrupación que luego repetían los
parranderos: “Buenas tardes Señor Cura, buenas tardes tenga Usted…”. La
misma situación ocurría en Guarenas con Monseñor Pietro Parolín. Ambos Prelados
consintieron en cargar a la muñeca que representa a “Rosa Ignacia”, y danzar al
ritmo de la Parranda de San Pedro, lo cual entusiasmó a los asistentes. Luego
de los cantos de la parranda, se realzaron los recorridos por las calles de
estas poblaciones mirandinas.
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