Los jóvenes se apostaron con su protesta frente a la sede de la OEA en Caracas, para pedir a los organismos internacionales velar por el respeto de los derechos humanos en Venezuela, y de manera especial, iniciaron esta lucha por los presos políticos. Las huelgas de hambre en el país, tienen precedentes fatales, como ocurrió con el productor agropecuario Franklin Brito, cuyas exigencias fueron desestimadoas por el gobierno autoritario que rige en Venezuela.
Ramón Antonio Pérez
elguardiancatolico@gmail.com
Caracas, 31 de enero de 2011.- Nuevamente la juventud venezolana toma el protagionismo por el cambio en Venezuela, cuando este lunes, desde muy temprano un grupo de universitarios integrantes del movimiento Juventud Activa Venezuela Unida (JAVU), se declaran en huelga de hambre frente a la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), en esta ciudad.
El secretario nacional de JAVU, Ulises Rojas Chacín, informó a través del Blog de la Organización, que “la protesta tiene la finalidad de exigir la libertad de la Jueza Afiuni, la incorporación al parlamento del diputado Mazuco, la revisión de su caso y la libertad inmediata del diputado Biagio Pillieri, además el cese a su persecución”.
Indicó que los jóvenes en protesta, “también reclaman el incumplimiento del pacto por parte del Secretario General de la OEA, además exhortan al organismo internacional a velar por el respeto de los derechos humanos en el país”.
Por su parte, el coordinador nacional de esta plataforma juvenil, Lorent Saleh, indicó que se declaraban en huelga de hambre “exigiendo la libertad de estos presos políticos y el cumplimiento inmediato del compromiso adquirido por el secretario general Insulza en anterior oportunidad”.
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