Catequesis hoy en la audiencia general, sobre la
curación de la suegra de Pedro
I.Media / Aleteia - publicado el 15/06/22
El Papa Francisco recalcó el mensaje de que las personas mayores no pueden quedar fuera de la sociedad o de la Iglesia, durante la Audiencia General del 15 de junio de 2022.
Reconociendo que los mayores,
como él, necesitan tomar conciencia de sus limitaciones físicas, destacó su
sabiduría y volvió a abogar por un diálogo entre los ancianos y los jóvenes.
El Papa comenzó su catequesis, impartida en la Plaza de San Pedro, con una breve confidencia personal.
De viejos, no podemos hacer lo mismo que hicimos cuando éramos jóvenes. El cuerpo tiene otro ritmo y tenemos que escuchar al cuerpo y aceptar sus límites. Todos los tenemos, ¿no? Yo también tengo que caminar con bastón ahora…, confió, provocando algunos aplausos en la multitud.
Durante varias semanas, el Papa Francisco ha estado
usando una silla de ruedas o un bastón para aliviar su rodilla.
En esta nueva reflexión sobre la vejez, el Papa quiso
comentar la historia de la curación de la suegra del apóstol Pedro; e insistió
en la necesidad de visitar a las personas de edad y enfermas, «especialmente en
nuestro tiempo en que el número de ancianos va en aumento”.
Debemos sentir la responsabilidad de visitar a los ancianos que a menudo están solos y presentarlos al Señor con nuestra oración, insistió. Explicó que, a través de esta atención concreta, se comunica al enfermo la «Salvación».
Dejando de lado el discurso que llevaba preparado, volvió a lamentar la cultura del descarte en la que se margina o se oculta a los ancianos. «No los matamos, pero los apartamos socialmente, como si fueran una carga», condenó.
Diálogo entre generaciones
Esta cultura de «elegir la vida según la utilidad» es
para él «una traición a la humanidad». Debemos, advirtió, considerar la vida
«como es», con «la sabiduría de los ancianos», con sus límites también.
Recordando que el diálogo entre jóvenes y mayores es
«fundamental» para la sociedad y para la Iglesia, advirtió contra la creación
de una generación «sin pasado» y «sin raíces» si el encuentro entre las edades
deja de darse.
Volviendo al relato de la curación de la suegra de
Pedro, el Papa subrayó el agradecimiento de ella que, una vez curada, se
levantó y se puso al servicio de Jesús y de los discípulos. Luego señaló que
Dios no rechaza a las personas porque son viejas. Al contrario, les da «fuerza
para servir».
Antes de concluir su catequesis, el Papa aclaró que el
servicio mencionado en el Evangelio no era «simplemente un asunto de mujeres».
El servicio evangélico de la gratitud por la ternura de Dios no está en modo alguno inscrito en la gramática del amo y de la sierva, aseguró.
Y añadió también que las mujeres, «sobre la
gratitud y la ternura de la fe, pueden enseñar a los hombres cosas que a éstos
les cuesta más entender».
Tags:
0 Comentarios
Comentarios de Nuestros Visitantes
Agradecemos sus comentarios, siempre en favor de nuestra Fe Cristiana Católica y de manera positiva. Si considera válido su comentario para ser publicado, se agradece no usar una cuenta anónima o desconocida.