Una vez más, la sede del Instituto Venezolano de Capacitación
Profesional de la Iglesia, INVECAPI fue “visitada por los amigos de lo ajeno”
Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
Nota de Prensa y Fotos @CEVmedios
Caracas, 21 de julio de
2016.- Un nuevo episodio de robo y violencia contra instalaciones de la Iglesia católica ha ocurrido, esta vez, en la sede del Episcopado Venezolano. Es algo que parece inaudito pero ya se hace frecuente, no sólo en Caracas, sino en todo el territorio nacional.
Cuando no son las profanaciones a los espacios sagrados como templos, capillas, el mismo Santísimo Sacramento e imágenes religiosas, son robos de osamentas en las tumbas de hombres de la Iglesia en los cementerios públicos.
Otras veces son blancos de los ataques los espacios administrativos, colegios e instituciones. Incluso, hombres y mujeres consagrados han recibido ataques directos por parte de la delincuencia común o "enviada" por enemigos de la fe.
Esta vez los hechos ocurrieron la madrugada del 21 de julio. Sujetos hasta ahora desconocido violentaron las rejas de las
instalaciones de INVECAPI, en la sede de la Conferencia Episcopal. Cortaron el cerco eléctrico “para
llevarse los comprensores de los aires acondicionados, cocina, microondas, computadoras, inmobiliario y
utensilios de oficina”, informó la oficina de prensa de la CEV.
Además, sustrajeron materiales de trabajo de los
estudiantes que se forman en este instituto, sumando a la acción delictiva el “daño
material que realizaron a las infraestructura al romper puertas, ventanas,
rejas, paredes, sillas, muebles y otros bienes”.
La vigilancia privada de la institución al
percatarse de lo sucedido dio parte a las autoridades a través de una
llamada telefónica del servicio de emergencia, y estos respondieron que “no tenían
unidades para poder acercarse y corroborar el hecho”.
Ya en horas de la mañana, el personal que labora en
la institución fue a realizar la denuncia ante los organismos competentes y la
respuesta que recibieron fue que “para proceder la denuncia debían presentar
las facturas o inventario”, revela la nota informativa.
Entre las cosas que más lamentan, aparte del
destrozo a las instalaciones, es el robo de los equipos que sirven para la
capacitación profesional de miles de jóvenes que se forman en los distintos
programas de aprendizaje en el sector productivo empresarial.
Estos programas van desde la habilitación
profesional a corto plazo, la formación comercial e industrial donde los
participantes se preparan en oficios tales como secretariado, herrería superior,
muñequería, corte y costura; y en programas de alfabetización y demás cursos
de perfeccionamiento en los que profundizan lo aprendido en programas de Higiene
y Seguridad, Relaciones Humanas, Legislación Turística, Manejo de Internet,
entre otros.
Según declaraciones de quienes laboran en INVECAPI
no es la primera vez que sufren este tipo de inconvenientes, pues hace poco
menos de un mes robaron más de 30 equipos de capacitación en el área de
estética.
“INVECAPI es una institución sin fines de lucro, perteneciente a la Conferencia Episcopal Venezolana", dice la nota informativa.
Está orientada a la formación integral del hombre, por ello está en
constante búsqueda de Entes Públicos o Privados que refuercen económicamente su
labor, a fin de poder ejecutar sus programas orientados hacia la capacitación
de la juventud desocupada, educación de adultos, formación profesional y todo
tipo de actividades relacionadas con el trabajo y la promoción humana.
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