La Conferencia Episcopal
Venezolana acometerá las tareas y planes pastorales durante el período 2015-2018,
en comunión con el Papa
Ramón Antonio Pérez
@GuardianCatolic
Caracas, 09 de enero, de 2015.- Monseñor Diego Padrón Sánchez, arzobispo de Cumaná,
fue reelecto a la presidencia del episcopado venezolano, considerándose su relección
un apoyo directo del Papa Francisco, toda vez que para ocupar el cargo por segunda ocasión consecutiva, se necesitaba una dispensa firmada desde El
Vaticano.
Algunos periodistas que
esperaban los resultados de la elección prevista para este 9 de enero, estaban
atentos a otros nombres, tomando en cuenta que la tradición hasta ahora había sido la
designación de los arzobispos que no han tenido responsabilidades de
conducción en la CEV. Pero no fue así.
La sorpresa resultó ser la “ratificación”
de las actuales autoridades, lo que se debió realizar bajo el visto bueno del Papa
Francisco, avalando de esta manera la gestión de la directiva que repite.
De modo que durante el
período que cubrirá desde esta fecha hasta enero de 2018, Monseñor Padrón
continuará acompañado en la primera vice presidencia por Monseñor José Luis
Azuaje, y en la segunda vice presidencia por Monseñor Mario Moronta. Entretanto,
el cargo de secretario general, recayó en manos del padre Víctor Hugo Basabe,
quien se desempeñaba con sub secretario, y suple de esta manera al obispo
auxiliar de Caracas, Monseñor Jesús González de Zárate.
Durante su corta
intervención ante los medios de comunicación, Monseñor Padrón ratificó sus
deseos de continuar trabajando por lograr un clima de hermandad y de paz entre
los venezolanos.
“Quiero ante todo dar profundas
gracias a la Conferencia Episcopal que ha querido que continúe prestando un
servicio hasta tanto tenga que dar paso a otro presidente, y comparto este
servicio junto con el primer vicepresidente, José Luis Azuaje Ayala, también
ratificado, y con su excelencia Mario Moronta Rodríguez que ha sido ratificado”,
expresó el Prelado.
De igual manera, el
arzobispo de Cumaná indicó que que si bien habrá continuidad en la forma de
trabajar de la directiva de la CEV, también habrá novedades para responder a “los
retos de la iglesia y del pueblo venezolano”; al mismo tiempo que
ofreció a la “Conferencia Episcopal Venezolana como la casa de todos los venezolanos
sin distinción alguna”.
En resumen, la gestión de la
directiva del Episcopado Venezolano ha recibido apoyo pleno tanto de los
obispos que la integran, como del Papa Francisco, entendido este en el espaldarazo
que Roma le brinda a la Iglesia de Venezuela.
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