Padre Josiah K’Okal, Misionero de la Consolata fue hallado ahorcado cerca de Tucupita, Venezuela

"Los Misioneros de la Consolata en la Delegación de Venezuela, lamentamos comunicarles el sensible fallecimiento de nuestro hermano Padre Josiah K'okal", dice la nota de duelo emitida por la congregación a la pertenecía el misionero

Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
Publicado el 02 de enero de 2024

El Padre Josiah K'okal de la Congregación Misioneros de la Consolata fue encontrado sin vida este 2 de enero, confirmaron fuentes ligadas a la congregación en Tucupita, estado Delta Amacuro. Su cuerpo fue hallado en una zona boscosa en Guara, estado Monagas.

Los Misioneros de la Consolata en la Delegación de Venezuela, lamentamos comunicarles el sensible fallecimiento de nuestro hermano Padre Josiah K'okal, dice la nota de duelo conocida por El Guardián Católico.

Salió con destino desconocido

El Padre Josiah K’Okal, salió de la sede de esta congregación en Paloma, Tucupita, con destino desconocido el 1 de enero de 2024. 

De acuerdo con sus compañeros, dice Radio Fe y Alegría, no les informó hacia dónde iba. No obstante, dado a que era una persona muy querida y conocida, le siguieron la pista hasta que salió del territorio del estado Delta Amacuro a través del punto de control El Cierre.

Agrega la información que a partir de ese tramo, su pista se perdió porque desde allí “es una zona solitaria con apenas algunas casas en zonas lejanas”. Desde el 1 de enero, funcionarios policiales iniciaron su búsqueda atendiendo la denuncia de su desaparición.

Conocida la noticia a través de las redes sociales, este martes, cerca de las diez y treinta de la mañana se conoció el hallazgo de un cuerpo con las características similares a las del sacerdote. Inmediatamente, una comisión de la Congregación se trasladó al lugar y confirmó que el cuerpo es del sacerdote Josiah K’Okal.

De acuerdo con el portal Tane Tanae, un medio regional que le hace seguimiento a esta noticia, el cuerpo inerte del misionero “pendía de un árbol de mangos a una altura considerable, presuntamente ahorcado”. 

Los cuerpos de investigaciones realizan las indagaciones correspondientes del caso para determinar las causas de este lamentable hecho...

Dedicó su vida a los indígenas

Josiah K’Okal nació en Kenia y vivió su vida misionera con alegría, inteligencia, estudio, investigación y espiritualidad, en Venezuela (su nueva nacionalidad), desde 1997.

El pueblo Warao, las poblaciones empobrecidas del Delta Amacuro y el Instituto misionero de la Consolata fueron sus tres amores. A ellos dedicó toda su vida misionera.

“Gracias al Dios de la misión por ti y gracias a ti por tu vida y la manera de donarla”, dice el perfil de Facebook del Instituto Misionero de la Consolata.