Venezuela se encuentra de último en
Latinoamérica con menos del 5 por ciento de la población vacunada contra la
pandemia. Pensionados y jubilados denunciaron el “relajo sanitario” de parte
del gobierno. La Iglesia está dispuesta a colaborar con el plan de vacunación
Ramón Antonio Pérez - Aleteia Venezuela
publicado el 28/06/21
Las colas en los centros de salud,
colegios, hoteles y otros espacios son largas y masivas cada vez que el
gobierno de Nicolás Maduro, a través del sistema que rige a los afiliados al
Carnet de la Patria, convoca jornadas de vacunación anti Covid-19. Pero como
si de una máxima se tratara, a mayor concurrencia mayor frustración. De
nada vale ser convocado o levantarse temprano porque las vacunas no son suficientes
en Venezuela.
Testigo de esto fue la señora María
Cáceres, de 78 años de edad, según conoció Aleteia. Desde el barrio Mirador del
Este de Petare, fue convocada a la Plaza Miranda de Los Dos Caminos con el fin
de ser vacunada. “Nos tuvieron durante más de cuatro horas en cola.
Decían que las vacunas no llegaban y al final aparecieron algunas”,
dijo la mujer.
Su relato fue más allá. En medio del desespero y la aglomeración de personas, Cáceres preguntó a uno de los responsables: “¿Por qué convocan a los mayores si no tienen las vacunas?”- No obtuvo respuestas adecuadas. “Ahí quedaron las personas convocadas y las vacunas se habían acabado. Eso no puede ser”, expresó con frustración.
Incapaces de controlar el coronavirus
Venezuela presenta el índice más bajo entre los países que no han vacunado a su población: menos del 5 por ciento. Lo ratifica la ONG Médicos Unidos de Venezuela, sustentada en datos de la Organización Panamericana de la Salud.
“Seguimos siendo el último país en América en vacunas aplicadas”,
publicaron este 24 de junio en las redes sociales. “A esa velocidad
alcanzaremos inmunidad de rebaño en 10 años”.
El doctor Rafael Arreaza, ex presidente del Instituto Venezolanos de los Seguros Sociales, durante el segundo período de gobierno de Rafael Caldera (1994-1999), reconoce que el 5 por ciento de la población ha sido vacunada.
“El sector salud sólo ha
sido vacunado un 25 por ciento, mientras que la población ha sido inmunizada en
un 5 por ciento”, aseguró en conversación con Aleteia, durante una
protesta realizada en Caracas.
“El tema del Coronavirus se ha
vuelto inmanejable”, indicó el especialista en seguridad social. “Estamos
en una emergencia sanitaria y el gobierno es incapaz de controlarla, y de
dejarse asesorar sobre la materia”, aseguró.
Como ejemplo dijo que “la
segunda dosis debe ser aplicada entre 2 o 3 semanas después de la primera
dosis, y no en 90 días como pretende el gobierno”, situación que “pone
en peligro la vida de la población ante el riesgo de contagiarse”.
El gobierno tiene otra versión.
Carlos Alvarado, ministro salud, dijo el 12 de junio, que el país cuenta con
suficientes vacunas para inmunizar a 13% de la meta, establecida en el 70% de
la población para este año, es decir, 22 millones de venezolanos. No obstante,
la cifra exacta de vacunados se desconoce por la falta de información.
Protestas exigiendo vacunas y otros
derechos
Hasta ahora las vacunas han sido
destinadas a los sanitarios y personas mayores de 60 años convocadas por el
Sistema Patria. Pero el virus no tiene preferencias ni identifica afiliaciones
políticas y continúa incrementando las cifras de fallecidos y contagiados. Por
eso, tanto en los lugares convocados para vacunar como en otros sitios, se han
generado protestas exigiendo que los productos biológicos sean para toda la
población.
Una de estas manifestaciones ocurrió
el martes 22 de junio cuando empleados públicos, jubilados y pensionados
alzaron su voz en todo el país para rechazar la improvisación en materia
económica y sanitaria. Reunidos en la Plaza La Moneda, cerca del Palacio de
Miraflores, en Caracas. Aleteia constató sus exigencias: “¡Si no los mata el
hambre con la hiperinflación, nos aniquilará el Covid 19, por la falta de
inmunización!”.
Esta vez los abuelitos, convocados
por la Federación de Jubilados y Pensionados de Venezuela, no sólo reclamaban
por la falta de vacuna contra la pandemia, también por el deterioro de su
calidad de vida, los bajos ingresos económicos, y el alto costo de los
alimentos y medicinas. “¡Todos merecemos vivir!”, gritaban una y
otra vez.
Emilio Lozada, presidente del gremio
catalogó la situación como un “relajo sanitario” que no garantiza la cantidad
de vacunas para proteger a toda la población que vive en el país. “Únicamente
da acceso a sus partidarios, o los que tienen el Carnet de la Patria, creando
exclusión en la población”, indicó al ser consultado.
“Lo que están haciendo es un
genocidio en gota. Al parecer, al gobierno lo único que le interesa es
mantenerse en el poder sin importar la vida de la gente”, denunció.
Mostró su preocupación por las que considera “mentiras que expresa el gobierno” con respecto a la llegada de las vacunas, especialmente con la segunda dosis. “Se agotaron los insumos, y mucha gente se quedó sin aplicarse la misma hasta nuevo aviso”.
“Cada día la vida se pone más dura”
La profesora jubilada Ana Colmenares
expresó su consternación por la grave situación humanitaria del país y que hace
imposible la subsistencia de la población. Además de las insuficientes vacunas
habló de los “sueldos de hambre” que “no alcanza para adquirir los productos de
la cesta básica para alimentarse bien y tener calidad de vida”.
Confesó que su salud se ha deteriorado muchísimo por no comer bien. “Lo poco que gano no me alcanza para realizar los exámenes médicos que requiero para hacer seguimiento a la anemia que me aqueja”. Aunque la profesora Colmenares recibió la primera dosis de la vacuna, tiene varios días a la espera de la segunda aplicación.
Iglesia quiere colaborar en el Plan de Vacunación
El gobierno venezolano reportó el
jueves 24 de junio 16 fallecimientos y 1.091 contagios del Covid-19. Con estos
números, Venezuela alcanza 265.642 casos, de los cuales 246.983 se recuperaron;
15.636 se mantienen activos; y 3.023 fallecieron.
En la misma fecha, desde la
vicepresidencia de Venezuela, se conoció que el país recibirá un primer lote de
la vacuna Abdala producida en Cuba, como parte de una dotación de doce millones
de dosis que arribarán en los próximos meses. “Esta vacuna se incorpora
al proceso de inmunización y al plan de vacunación”, dijo Delcy
Rodríguez.
La Academia Nacional de la Medicina
de Venezuela (ANM), este 25 de junio catalogó a los productos Abdala y Soberana
02, como “candidatos a vacuna” y “desarrollos experimentales” semejante
a los realizados en otras partes del mundo pero que “todavía no han
resultado en el desarrollo de ninguna vacuna de comprobada eficacia”.
Dicen que de “Soberana 02 hay una
pre publicación sobre su efecto en modelos animales, y de la Abdala no hay nada
publicado”. En todo caso,
desde la ANM que
encabezan los doctores Enrique López Loyo y Huniades Urbina-Medina, creen
que la opinión de la Organización Mundial de la Salud y de la Organización
Panamericana de la Salud sería muy importante, ante de que los biológicos
se apliquen en Venezuela
En medio de este panorama, la
iglesia venezolana en la voz del cardenal Baltazar Enrique Porras Cardozo,
mostró disposición a colaborar en el avance del plan de vacunación nacional,
dijo durante una entrevista con la emisora de Caracas Unión Radio.
“Se requiere la participación de
todos y una planificación para que no sea como que estás repartiendo en una
piñata a ver a quién le cae”. Acotó que el apoyo de la Iglesia será “sin
protagonismo ni aplausos, porque lo que nos preocupa es la vida de todos”.
0 Comentarios
Comentarios de Nuestros Visitantes
Agradecemos sus comentarios, siempre en favor de nuestra Fe Cristiana Católica y de manera positiva. Si considera válido su comentario para ser publicado, se agradece no usar una cuenta anónima o desconocida.