La Parranda de San Pedro fue celebrada en Guarenas y Guatire

Ramón Antonio Pérez

Las poblaciones mirandinas de Guarenas y Guatire celebraron el 29 de junio la tradicional Parranda de San Pedro, festejo que data de la época de la Colonia, y que recuerda el milagro que el santo fundamental de la Iglesia Católica realizó a una esclava de la época colonial

Guarenas, 29 de junio de 2007. La celebración comenzó con una misa que fue concelebrada en la Catedral “Nuestra Señora de Copacabana” por Monseñor Gustavo García Naranjo, en compañía de los sacerdotes de la Diócesis de Guarenas.
En su homilía, el prelado recordó la importancia que tiene el apóstol San Pedro, para la fundación de la Iglesia, ya que con la expresión de Jesucristo: “Tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia”, que expuso citando los Evangelios, comenzó todo el peregrinar de los cristianos en el mundo.
La Parranda de San Pedro es una de las manifestaciones folklóricas de mayor expresión y contenido de toda la región de Guarenas y Guatire. Si bien, la génesis de ambas parrandas las emparienta, el tiempo y las circunstancias, han permitido que sostengan marcadas diferencias, y cada ciudad tiene su propia parranda.
--------------------------------------------------------------------------------------------------
Para conocimiento de los lectores de El Guardián Católico, en este reportaje únicamente se harán comentarios de la Parranda de San Pedro de Guarenas.

Un poco de historia
En los años que van de 1.620 en adelante, la forma de vida de los moradores de la zona de Guarenas y Guatire, era la agricultura. En las haciendas de la zona el cultivo de algodón, caña de azúcar y la cría de ganado porcino y vacuno eran las principales fuentes de vida para el momento.
La explotación de las haciendas de cultivo, era efectuada por una mano de obra predominantemente esclava. Entre las plantaciones de mayor fuerza y prestigio se encontraba la Hacienda de San Pedro. En dicha hacienda regía la religión católica y, precisamente, San Pedro Apóstol, era el santo patrón. Estaba ubicada entre los límites de Guarenas y Guatire.
Según documentos que avalan la información que aquí expresada, los límites de la Hacienda de San Pedro han sido desde su fundación los siguientes:
Por el Norte: limita con el antiguo camino que conduce a Guatire.
Por el Sur: Con la Quebrada de Guarenas, el río de Caucagua; la naciente hacienda de Casarapa y la Hacienda Santa Cruz…Sin embargo, en la época actual, no es posible determinar si pertenece a Guarenas o Guatire.
Todavía es motivo de disputa territorial y las diferencias se han acrecentado por la explotación urbana y comercial que los terrenos han experimentado.
Cuenta la historia que una negra llamada María Ignacia, esclava de una de las haciendas vecinas de Santa Cruz de Pacairigua, hoy Guatire, contaba con la buena confianza de los patrones. Un día, su hija Rosa Ignacia, enfermó. Agotados los recursos de los brujos y curanderos, en medio de una gran desesperación, pidió ayuda a San Pedro Apóstol.
Como promesa al santo patrón, ofreció cantar y bailar si su hija superaba la terrible y desconocida enfermedad. El milagro se realizó y María Ignacia se dedicó a cumplirle la promesa a San Pedro Apóstol, todos los 29 de junio, bailando y cantando con su hija Rosa Ignacia en brazos.

¿Existió verdaderamente la esclava María Ignacia?...
Para algunos historiadores locales, ha sido imposible ubicar documentos que avalen su existencia. Otros en cambio sostienen que sí existen y se remiten a pruebas ubicadas en los libros parroquiales más antiguos de la ciudad de Guarenas.
Según el archivo Parroquial de la Catedral “Nuestra Señora de Copacabana”, en Guarenas, fue verídica la existencia de María Ignacia. Nació el 31 de julio de 1800 y fue bautizada el 11 de agosto de 1800 por el sacerdote Juan Antonio Díaz Argote. Era esclava del hacendado don Gabriel Blanco Uribe.

Las características de la parranda
En la medida en que la promesa de María Ignacia se iba consolidando, los demás esclavos se incorporaban y hacían suyo el cumplimiento.
Los hombres, durante la observancia de la promesa, se vestían con levita y pantalones de color negro, el sombrero conocido como pumpá y alpargatas de cuero. Además, alrededor del cuello, se colocan un pañuelo de color amartillo o rojo, que simbolizaban a los partidos Liberales o Conservadores.
Mientras cantaban lo hacían con estrofas de protesta por el maltrato recibido de parte de los patrones. Zapateaban contra el suelo usando las cotizas de cuero y diciendo: “Con la cotiza dale patrón, vuélvelo polvo sin compasión”….

El San Pedro de Guarenas
Cuando muere María Ignacia, su fiel marido se viste de mujer y continúa con el pago de la promesa a San Pedro Apóstol. Luego, distintos hombres se han disfrazado de María Ignacia, cargando una muñeca que representa a su hija.

También forman parte de esta parranda:
1. El Abanderado. Es el encargado de dirigir la ruta por donde transitarán bailando.
2. El Cargador. Tiene la responsabilidad de transportar la imagen de San Pedro durante el recorrido de la parranda.
3. Los Tucusitos. Son dos niños vestidos de azul y rojo.
4. Los Sanpedreños. Son lo seguidores de la parranda que ataviados con cotizas debajo de las alpargatas, se encargan de bailar y contestar las estrofas de un cantante improvisador.
En Guarenas, después de la misa solemne del 29 de junio, la parranda recorre las calles principales, y va de casa en casa, llevando la alegría a los vecinos de esta localidad mirandina.
La cámara edilicia de esta ciudad, con fecha 11 de abril de 1998, emitió una ordenanza dando la potestad de la parranda a la Asociación Civil Antonio Núñez. Es un homenaje a la familia descendiente de los Sanpedreños originarios, quienes conservaron la tradición durante más de un siglo, siendo en la actualidad el más representativo de sus miembros, el guarenero Pablo Núñez.
Algunos de los videos de la Parranda de San Pedro 2007

Publicar un comentario

0 Comentarios