La Diócesis de Guarenas
caminó y rezó por la falta de comida y de medicamentos; y por quienes han
migrado fuera de Venezuela buscando mejores oportunidades en otros países
Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
Guarenas, 14 de mayo de 2018
“Tal
vez muchos de los que estamos aquí haciendo esta marcha por la paz pensamos que
esta pueda ser imposible: que la situación en Venezuela se va a poner peor y que
la gente se va a odiar más. Pero no es así hermanos. Nosotros hemos hecho esta
peregrinación acompañados de la Virgen María porque al igual que nuestra Madre Celestial,
sabemos que lo que es imposible para los hombres es posible para Dios”.
De
esta manera reflexionaba el Obispo de la Diócesis de Guarenas, monseñor Gustavo
García Naranjo, el sábado 12 de mayo, cuando presidió una misa en la parroquia “Nuestra
Señora de Coromoto”, en la urbanización Trapichito, al concluir una caminata que
tenía por lema: “Guarenas camina con
María hacia la Esperanza”.
Venezuela necesita de nosotros
Los
guareneros rezaron no sólo por las necesidades espirituales de Venezuela, sino
también por quienes sufren ante la falta de comida y de medicamentos, y por los
venezolanos que han migrado hacia otros países buscando un mejor porvenir.
“Está
en nosotros escuchar y entender las señales que Dios nos pone en nuestro camino
y de entender esa voz del Señor que nos habla”, dijo.
El
Obispo de Guarenas expresó que los creyentes católicos “también estamos
inmersos en esta sociedad venezolana, y aunque muchas veces queramos ignorarlo no
podemos verdaderamente prescindir de las cosas que pasan en nuestra sociedad”.
“Venezuela
necesita de nosotros así como el mundo necesitó de María para que Cristo se
hiciese presente”, aseguró. “Y Cristo se va hacer presente en esta realidad venezolana,
cuando nosotros como María, podamos responder con alegría y disponibilidad a esa
llamada que Él nos está haciendo”, acotó el prelado.
Un compromiso diocesano
El
Movimiento de Cursillos de Cristiandad de la Diócesis de Guarenas, asumió la organización
de la caminata, pero se sumaron con igual entusiasmo otros movimientos de
apostolado y algunos colegios católicos de la Vicaría
Guarenas Guatire y Araira.
El anfitrión fue el padre Luciano Labrador, párroco
de Nuestra Señora de Coromoto, quien acompañó la caminata desde la Iglesia de La Candelaria.
La
caminata salió a las 8:30 de la mañana desde dos lugares distintos: la Iglesia
La Candelaria, y la parroquia “Asunción de María” en La Villa Panamericana. Luego
de atravesar ambos trayectos de la avenida Intercomunal, las caminatas se encontraron
frente al terminal de pasajeros de Trapichito desde donde prosiguieron cantando
y rezando el Santo Rosario hacia la iglesia Nuestra Señora de Coromoto.
Durante
la actividad participaron los presbíteros José Antonio Barrera Ruiz, párroco de
Copacabana, en el Pueblo Arriba de Guarenas; Teodoro Sosa, del Sagrado Corazón
de Jesús, en la urbanización Doña Menca de Leoni; Beltrán Alcides Sánchez Mora,
de Santa Cruz de Pacairigua, en Guatire; y el diácono permanente, de San José
Obrero, del sector Las Clavellinas. El anfitrión fue el padre Luciano Labrador,
párroco de Nuestra Señora de Coromoto, quien acompañó la peregrinación desde La
Candelaria.
Beatificación de Madre Carmen
Rendiles
El padre Labrador invitó a la ceremonia
de beatificación de Madre Carmen Rendiles Martínez, el 16 de junio, a las 10 de
la mañana, en el estadio de béisbol de la UCV DE Caracas.
“Será una gran fiesta de la
iglesia por la cual damos gracias a Dios. Vamos acudir a la beatificación”,
dijo el sacerdote.
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