“Somos
un pueblo identificado con la justicia y la paz, respetuosos de los valores
morales y espirituales arraigados en nuestras familias. Podemos dirimir
nuestros conflictos en un marco civilizado, pacífico y democrático. La
violencia es el arma de los que no tienen la razón. Vivimos en una sociedad donde
está arraigado el pecado estructural que, por consiguiente, siempre impone la
cultura de la muerte, el caos y la confusión”.
Así
lo denunció Ulises Antonio Gutiérrez, arzobispo de Ciudad Bolívar, en un
mensaje que visibilizó la caótica situación vivida en esta entidad al sur de
Venezuela, con motivo del rechazo a las políticas económicas implementadas por el
Gobierno de Nicolás Maduro desde el 11 de diciembre, y que tuvo sus fechas más
trágicas los subsiguientes días 15, 16, 17 y 18.
Explicó
que muchos
comerciantes, “víctimas de estos actos vandálicos, no dejan de expresar sus
sentimientos de dolor e impotencia al ver que, de la noche a la mañana, el
esfuerzo y sacrificio de su trabajo se ve desvanecido”. Por eso, la
Iglesia venezolana les manifestó su “solidaridad y cercanía, implorando la
justicia y la misericordia de Dios”.
El
prelado también mostró su “solidaridad con la población humilde y
sencilla del estado Bolívar, que sufre con dolor y tristeza, pero que
con fe y esperanza no se rinde ante las adversidades, sino que lucha por un
progreso y un mejor porvenir”. Al mismo tiempo, denunció “el silencio de los medios de
comunicación, tanto a nivel nacional como regional, lo que ha favoreciendo
rumores, zozobra y pánico en la población”.
La Conferencia Episcopal Venezolana,
desde el 17 de diciembre, criticó al Gobierno por poner fuera de circulación,
en este momento del año, el billete de más alta denominación (Cien Bolívares) y
la manera apresurada de implementar la medida. “Han causado graves molestias a
toda la población y han provocado indignación, rechazo y violencia”, indicó.
Más de quinientos negocios saqueados
Austerio
González, presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Bolívar, contó que
estos hechos ocurrieron no sólo en la antigua Angostura, también en las
parroquias La Sabanita, Agua Salada, Catedral y Vista Hermosa, convirtiéndose
la situación “como una catástrofe, un terremoto o algo similar”, con “más de
350 comercios saqueados”.
Américo
de Grazia, diputado a la Asamblea Nacional, aseguró que otras ciudades del
estado Bolívar como El Callao, Ciudad Piar, La Paragua, Tumeremo, Guasipati,
Santa Elena de Uairén y Tocomita también quedaron devastadas, producto del
rechazo al Gobierno.
El saldo
final de las revueltas que comenzaron a nivel nacional el 15 de diciembre, fue
de más de quinientos negocios totalmente saqueados. En el estado Bolívar hubo cinco
víctimas: Julio César Artiaga, de 39 años de edad; Yoici Eukaris España (34); y
un adolescente (14); todos con disparos en la cabeza. Los dos restantes todavía
no han sido identificados.
¿Cómo se llegó a esta situación?
Algunos
consideran que todo ha sido planificado por el Gobierno con fines
inconfesables. Todo comenzó el 12 de diciembre con el anuncio hecho por Nicolás
Maduro en el marco de un decreto de excepción y emergencia económica que, en un
lapso de 72 horas suspendía la circulación del billete de 100 bolívares, el de
más alta denominación en Venezuela, para poner en funcionamiento un nuevo Cono
Monetario desde el 15 del mismo mes.
Los
bancos no fueron suficientes para recibir a los usuarios que se agolparon
frente a éstos con su dinero el día 15. Los comercios, el transporte y otros
sectores, dejaron de recibir pagos con el billete de 100, generando malestar y
pánico colectivo dado el corto tiempo de la medida y la fecha en que las ventas
adquieren sus niveles más altos: La Navidad.
El
país quedó paralizado y el “corralito” adquirió nombre propio: “El Billetazo de
Maduro”. “Los pobres, como siempre suele suceder, han sido los más perjudicados y
los más indefensos con las decisiones tomadas”, denunció la presidencia
del Episcopado. “De hecho, también amplios sectores populares –campesinos,
obreros, jefes de familia- por no tener cuentas bancarias han sido enormemente
perjudicados y dejados a la “buena de Dios”.
A la
fecha de este reporte, las medidas fueron revertidas hasta el 2 de enero de
2016, aunque se mantienen los cierres parciales en las fronteras con Colombia y
Brasil. Existe una situación de tensa calma y muchas expectativas por las
“Navidades Felices”, anunciadas por el régimen de Maduro que, en voz de
Diosdado Cabello, asomó “dos nuevas sorpresas” para el 24 y 31.
0 Comentarios
Comentarios de Nuestros Visitantes
Agradecemos sus comentarios, siempre en favor de nuestra Fe Cristiana Católica y de manera positiva. Si considera válido su comentario para ser publicado, se agradece no usar una cuenta anónima o desconocida.