Cofradía del Santísimo Sacramento celebró Bicentenario de su fundación

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En la Parroquia “Nuestra Señora del Rosario” de Antímano

“Al mismo tiempo que se crea la parroquia se piensa en la erección de una cofradía, es decir, una institución especialmente creada para rendir homenaje al Santísimo Sacramento", dijo el historiador Manuel Donís Ríos, hijo del cofrade más antiguo

Ramón Antonio Pérez

Caracas, 15 de junio de 2009. “Desde aquel 13 de febrero de 1808, nos sentimos orgullosos de mantener el fervor eucarístico así como velar por el culto y la fe católica. Esto lo hemos cumplido con ayuda de las generaciones que nos precedieron, y por supuesto, con nosotros en la actualidad, siempre guiados bajo el lema: eucaristía, valores y ciudadanía”. De esta manera se expresó el licenciado Freddy Hermoso, presidente de la Cofradía del Santísimo Sacramento, durante la celebración del bicentenario de esta organización católica que se realizó el domingo 14 de junio, día del Corpus Christi, en la Parroquia “Nuestra Señora del Rosario” de Antímano.

Cofradía significa familiaridad
Hermoso señaló que además de las actividades propias del culto eucarístico, también se vinculan con trabajos comunitarios siempre en apoyo de las actividades emprendidas por la Iglesia Católica. “En estos momentos la cofradía está participando en los primeros talleres de formación con miras a la Misión Continental Evangelizadora”, dijo.
“Además del mensaje eucarístico hablar de la cofradía significa hablar de regocijo, esperanza, mensajes fraternos, y por supuesto implica mucha familiaridad. Es un apostolado y el trabajo que siempre le queremos dar a nuestras familias”, dijo Hermoso.

Un poco de la historia de Antímano
El historiador Manuel Donís Ríos, quien también es director de doctorado en historia de la Universidad Católica Andrés Bello, fue uno de los invitados especiales a las actividades festivas. “Lo primero que viene a la mente en presencia de tantos jóvenes, es que el pueblo de Antímano como tal, ya tiene trescientos ochenta y ocho años de fundado. No nació con ese nombre sino como San Pedro y San Pablo, en 1621”. “Fue un pueblo de indios bastante pobre, pero que fue creciendo desde el punto de vista poblacional y económico, y para comienzos del siglo 19 es muy próspero”, relató a los asistentes en el salón parroquial.
“En 1809, el Arzobispado de Caracas, creado cuatro años antes, decide separar Antímano del pueblo de La Vega del que siempre fue sufragáneo y entonces se transforma en la Parroquia de Antímano”, acotó.

Parroquia y Cofradía
Comentó que la parroquia y la cofradía prácticamente fueron creadas de manera simultánea. “Al mismo tiempo que se crea la parroquia se piensa en la erección de una cofradía, es decir, una institución especialmente creada para homenajear al Santísimo Sacramento; también para que le diera estatus, categoría al pueblo y ayudara con todo lo relacionado a la fiestas religiosas, especialmente a la de Corpus Christi. Por su supuesto no podía quedar de lado en el ámbito social, la atención a los más necesitados a través de La Casa de la Caridad”, explicó Ríos.

Cofradía Mixta
La Cofradía del Santísimo Sacramento de Antímano fue fundada como una organización mixta, partir del 13 de febrero de 1808. “¿Qué nos quiere decir esto? Que siendo de las primeras fundadas en la Diócesis de Caracas, también fue de las primeras que les dio cabida a todos los estamentos o clases sociales existentes para la época. No sólo a los blancos como ocurrió en algunas de acuerdo a la mentalidad del momento; sino que aquí se le dio cabida en igualdad de condiciones, -aunque únicamente variaba el traje-, a pardos, negros, mulatos e indígenas”, comentó.

La medalla se lleva de corazón
Manuel Donís Ríos también es hijo del cofrade más antiguo -Manuel Antonio Donís, quien tiene 65 años en la Organización-, y siendo que él no es miembro, comentó la siguiente anécdota: “No soy cofrade porque mi papá un hombre sabio, un hombre serio, cuando yo tenía dieciocho años y quise entrar a la cofradía sólo por lucir la medalla me dijo: no hijo, la medalla no es para que la luzcas ni para que andes como un pavo real; la medalla es para cuando tengas fe y sepas apreciar lo que es la cofradía”.

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Otras actividades del Bicentenario

Cabe informar que en este evento estuvieron presentes familiares, amigos y allegados de los cofrades, entre éstos el párroco de "Nuestra Señora del Rosario de Antímano, Padre Carlos Guerendiaín. El sacerdote tuvo palabras de estímulo para los miembros de la Cofradía del Santísimo Sacramento. “Para nosotros Palabra (Biblia) y Eucaristía es toda una unidad. No podemos hablar de misa sin Palabra y sin Eucaristía, sin Sacrificio. En la eucaristía Cristo está realmente presente”, dijo
La celebración del bicentenario incluyó la participación de los cofrades en la misa dominical, donde más de noventa niños recibieron su Primera Comunión, luego de una formación en la que jugaron papel importante padres y representantes.
Al finalizar la misa realizaron procesión alrededor del templo parroquial, siendo acompañados por la comunidad católica de la zona. Continuaron con un acto central en el salón parroquial, donde se escucharon testimonios de algunos cofrades; se disfrutó de un recital del joven guitarrista venezolano Daniel Acosta con un variado repertorio que incluyó, entre otros, "Vals Nº 3", del maestro Antonio Lauro. Finalmente, frente a una torta representativa del documento fundacional se brindó con buen vino y cantó por el cumpleaños número doscientos, “que no es algo que se ve todos los días”, según se escuchó en la sala.

La directica de la organización está integrada además de Freddy Hermoso Herrada, en su rol de presidente, por Alberto Utrera, vice presidente; Edgar Carrillo, secretario de actas y correspondencias; Jessica Acosta Barrera, secretaria de finanzas; y Bartolo Ramón Benítez García, secretario de cultos y liturgia. También están los maestros de ceremonia Juana Márquez, Roberto Antonio Quevedo y Margarita Negrín, junto a treinta miembros activos y más de sesenta en condición de reserva. La esperanza de la cofradía está fundamentada en la juventud que se ha hecho amiga de la misma.